La mosca y la pared.

Volaba con alas, miraba con ojos y de la pared estaba enamorada.

Con el viento se asustaba y a las manos les tenía terror.

Un día estaba dormida sobre ella y de repente sus ojos no se abrieron más.

Una mano la alcanzó.

Su alma decansa junto a la pared, que poco a poco se descascara llorando de pena.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

q buenoooo maestroooo, otra gran hazaña del mostro d la redacción.
Grande federal.
Tenes tu talento.
Abrazos y dale padelante nomas q sos grosso, uno de los pocos grossos con los q m ha tocado laburar.


Abrazasossssssss


D

Anónimo dijo...

Buena historia! ... despertar sentimientos por una mosca, bicho feo como ninguno, es dificil!... felicitaciones ...

Pamela Caballero dijo...

No te lo puedo creer!!!La primera vez q siento pena por una mosca!!!Cuantas paredes estan llorando la ausencia de su mosca por mi culpa???Que mala persona soy,jeje.
Beso.
pame c

Anónimo dijo...

la lei 3 veces y a la tercera no la entendi

Anónimo dijo...

POBRE moskita!!