Un espejo de otro planeta.

Martén era su nombre y vivía en Marte.

Mientras lavaba sus dientes para irse a dormir, se miró fijamente en el espejo y dijo en voz alta: "Qué lindo soy".

Bajó la cabeza para enjuagarse la boca.

Pero cuando se asomó nuevamente al espejo algo terrible pasó.

Un humano apareció detrás de él.

6 comentarios:

bookCreativoNiko dijo...

un humano..
ambicioso y avaro?
egoista y egolatra¿
envidioso y cinico?

pobre de martén no?

Nacho dijo...

Y decí que no dijiste que ese humano era un morocho de 2.10m de estatura al que le gustaban los masajes de hombros...
Coincido, pobre Martén.

bookCreativoNiko dijo...

algunos estamos esperando la proxima historia

y no es publicidad jaja

mendocino en trasandilandia dijo...

Pobrecito el mostro, ya tenía suficiente con el nombre y además se le aparece un humano, de terror!


Un abrazo!

FLORENCIA SILVA dijo...

muy bueno fede ...

http://callecinnamon.blogspot.com

pasa cdo quieras

saludos

flor

Anónimo dijo...

es verdad, los humanos somos de temer