Música para la oreja.

Marcos estaba con sus queridos amigos en su casa de fin de semana. Era Sábado y era de noche.

Entre risas y copas, todos sentados alrededor de la mesa, se divertían sin poder parar. Lo que si paró fue la melodía, aturdida de tanto sonar. Ese equipo de música de los 80 no gustaba de la canción que tocaba al descompás.

El silencio se escuchaba justo cuando alguien hablaba sobre lo que nadie tenía que escuchar.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Primer comentario , buena idea , historias cortas!

Martina Gaido dijo...

Felicidades por el nuevo emprendimiento, ojalá llegués a los 500 post, y muchos más.

Muchas flores y buenas auras.
Brindis con champagne.

Anónimo dijo...

Cielito: Es tan común que justo cuando todos hacen silencio uno diga lo más inadecuado, que por lo general hablo bajo!je.
Mucha mierda en todo lo que emprendas.
Beso!
pame c.
PD: Sabes porque se dice mierda para desear los mejores éxitos???